¿SERA POSIBLE PROBAR QUE TRUMP PROVOCÓ UNA INSURRECCIÓN?
By: Mikel Hernandez
Los demócratas en el senado están empañados en enjuiciar al expresidente Donal J. Trump. Los fiscales acusadores quieren demostrar que Donald Trump incitó los disturbios en el Capitolio del 6 de enero con un video dramático que expone escenas caóticas de la insurrección con los comentarios del expresidente.
Un año después de su primer juicio político, Trump se encuentra en medio de un segundo juicio sin precedentes historicos y sin base legal. El juicio comienzo hoy martes en el Senado.
Tratando de encender la candela y crear la impresión de una historia aterradora solo vista en la mente de productores de Hollywood, el demócrata Jamie Raskin le ofreció un adelanto del juicio en una entrevista con el New York Times publicada el domingo. «La historia de las acciones del presidente es fascinante y aterradora», dijo Raskin. «Creemos que todo estadounidense debe estar al tanto de lo que sucedió, que la razón por la que fue acusado por la Cámara y la razón por la que debe ser condenado y descalificado para ocupar un cargo federal futuro es para asegurarse de que tal ataque a nuestra democracia y Constitución nunca sucede de nuevo. «
Se espera que los fiscales se concentren en un video que el periódico comparó con una ‘película de acción de gran éxito’, uniendo clips de la insurrección con los comentarios que hizo Trump mientras se desarrollaba la violencia.
En lugar de confiar en el testimonio de testigos para defender su caso, como ha sido la norma en juicios de acusación anteriores, Raskin y sus ocho colegas que componen la acusación están adoptando un enfoque creativo, dijeron al Times seis fuentes conocedoras de los planes demócratas.
El objetivo del video es recordar a los legisladores, como AOC, el miedo que sintieron cuando fueron llevados a un lugar seguro cuando cientos de partidarios de Trump violaron el Capitolio.
Los fiscales acusan a Trump de «crear un barril de pólvora, encender una cerilla y luego buscar una ventaja personal del caos resultante.»
La defensa se enfoca en dos puntos importantes: (1) que el juicio es ‘discutible’ porque Trump no puede ser destituido de un cargo que ya no ocupa, y que su retórica que arroja dudas sobre los resultados de las elecciones y sus explosivos comentarios del 6 de enero equivalían a un discurso protegido por la constitución.
La probabilidad real de condena es baja, porque requeriría que 17 republicanos rompiendo filas se unieran a los 48 demócratas y dos independientes para encontrar culpable a Trump.
El primer juicio, en el que Trump fue absuelto de los cargos de abuso de poder al presionar a Ucrania para que investigara al ahora presidente Joe Biden, fue dirigido por el mismo representante que hoy asesora a los demócratas, Adam Schiff (D – California). Sin embargo, una vez más, no tienen pruebas contundentes que justifiquen un juicio de destitución.
Es imposible lograr enjuiciar al presidente Trump, por las razones explicadas anteriormente y por muchas otras razones. Toda una gran farsa política para enjuiciar a un presidente que ya no es presidente y se desempeña como un civil más de este país. Solo, otra de las farsas demócratas para obtener influenciar la opinión de las masas.
