PRESOS POLÍTICOS EN LOS ESTADOS UNIDOS ¿HASTA DONDE LLEGARA ESTO?
Por: Michael Hernandez.
Según American Greatness (“AG”) Couy Griffin, el fundador de Cowboys for Trump, se encuentra hoy en un limbo legal por dudar que los resultados de las elecciones fuesen fraudulentos. Griffing, se niega a ser liberado bajo palabra y permanece in una cárcel.

Los fiscales acusan a Griffin de un cargo menor de allanamiento de morada como parte de la investigación del Departamento de Justicia sobre los acontecimientos del 6 de enero. Griffin, que es comisionado del condado en Nuevo México, nunca entró en el Capitolio, pero los investigadores buscaron su cuenta en las redes sociales para encontrar evidencia de que estaba «bien dentro del área restringida» del edificio.
Por lo que se sabe, Griffin no agredió a un oficial de policía ni rompió ninguna ventana ni incluso le robó la computadora portátil a Nancy Pelosi. Claro está que su verdadero crimen es que es un partidario de Donald Trump, y su verdadera amenaza para la sociedad, según los fiscales estadounidenses y un juez federal, es que Griffin se atreve a dudar del resultado de las elecciones presidenciales de 2020. (En su entrevista posterior al arresto, Griffin le dijo al FBI que «la elección fue robada»).
Argumentando que Griffin es un riesgo de fuga y debe permanecer en la cárcel durante todo su juicio, los abogados del gobierno afirmaron que su negativa a aceptar a Joe Biden como el presidente legítimamente elegido le haría también «negar la autoridad de los oficiales judiciales nombrados por el presidente y confirmados por el Senado».
El magistrado Zia Faruqui, que no fue nombrado por el presidente ni confirmado por el Senado, estuvo de acuerdo. «Se trata de una ofensa que, en el fondo, fue un intento de impedir que la democracia avanzara porque la gente no estaba contenta con los resultados de las elecciones», predicó Faruqui durante una audiencia del 1 de febrero. «No creo que el acusado siga mis condiciones si cree que soy parte de esta máquina del proceso democrático».
El juez agregó que negarse a aceptar el resultado de las elecciones de 2020 es como «no creer hechos o ciencia». (Faruqui, vale la pena señalar, fue nombrado magistrado federal el año pasado después de una carrera de 12 años en la oficina del Fiscal de los Estados Unidos D.C, la misma oficina supervisando cada 6 de enero el caso relacionado. Este es el pantano en acción.) Así que, ante un solo delito federal, Griffin permanecerá encerrado en el futuro previsible, como un preso político, mas que como un preso común. Es, a todos los efectos, él es un preso político. De hecho, algunas declaraciones del FBI se refieren a manifestantes anónimos como «insurrectionistas».
EL DELITO DE LAS CORTES DEL QUE NADIE QUIERE HABLAR
En los Estados Unidos se ha convertido en una práctica muy común para algunos jueces liberales hostigar a los conservadores inocentes en casos de familia con honorarios legales y sin fin en los procedimientos legales. Sin embargo, la prensa tradicional (“Mainstream Media”) no habla de estos casos de corrupción judicial, donde no solo le juez participa, pero todo un engranaje de corrupción, y conspiración que se echa a andar en los sistemas judiciales para acosar a muchas personas por solo ser conservadores. Estos engranajes incluyen a Jueces, abogados, coordinadores de crianza de niños, psicólogos, personal de los secretarios de las cortes (“Clerk of courts”), fiscales, e inclusive el departamento de niños y familias.